En un mundo donde la imagen corporal y la dieta saludable son temas cada vez más relevantes, los trastornos de la conducta alimentaria han emergido como una preocupación significativa para la salud mental y física. Estos trastornos, que incluyen anorexia nerviosa, bulimia nerviosa y trastorno por atracones, no solo afectan a la relación que las personas tienen con la comida, sino que también pueden tener consecuencias graves en su bienestar general.
A continuación, el psicólogo Francisco Hidalgo, te cuenta todo lo que tienes que saber sobre los trastornos de la conducta alimentaria y cómo solucionarlos.
¿Qué son los trastornos de la conducta alimentaria?
Los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) constituyen un conjunto de condiciones psicológicas que se caracterizan por una alteración significativa en la percepción de la propia imagen y una distorsión de la imagen corporal.
Las personas afectadas por estos trastornos exhiben una preocupación desmedida por el aumento de peso, lo cual persiste incluso cuando su peso corporal se encuentra dentro de un rango normal o notablemente inferior al promedio saludable.
Tipos de trastornos de la conducta alimentaria
Anorexia nerviosa
Se caracteriza principalmente por la restricción de la ingesta de comida, lo que resulta en un peso corporal inferior al considerado óptimo para la salud.
Las manifestaciones físicas de este trastorno pueden incluir la caída de cabello, piel seca y la amenorrea (falta de menstruación), así como la posibilidad de sufrir desnutrición y alteraciones hormonales.
Quienes la padecen experimentan un temor extremo al aumento de peso y presentan una imagen distorsionada de su cuerpo.
Adicionalmente, pueden recurrir a episodios de ingesta compulsiva seguidos de comportamientos purgativos, como inducir el vómito o el uso excesivo de laxantes, diuréticos o enemas. También es común que realicen ejercicio físico de manera excesiva con el objetivo de continuar perdiendo peso.
Bulimia nerviosa
El trastorno se manifiesta a través de episodios recurrentes de ingesta excesiva, en los cuales se consume una cantidad de alimento considerablemente mayor a la habitual en un breve periodo de tiempo, acompañados de una sensación de falta de control sobre el acto de comer.
Posteriormente, se adoptan comportamientos compensatorios inadecuados, tales como la autoinducción del vómito, el abuso de laxantes, diuréticos, enemas o medicamentos, así como periodos de ayuno y prácticas de ejercicio físico extremo.
Dado que estas acciones compensatorias pueden mantener el peso dentro de un rango normal, este trastorno puede ser menos evidente que la anorexia nerviosa.
Trastorno por atracones
Este trastorno se distingue por episodios repetidos de ingesta compulsiva, marcados por una sensación de falta de control. A diferencia de la bulimia nerviosa, no se observan conductas compensatorias inadecuadas tras los atracones.
¿Cómo se tratan los trastornos de la conducta alimentaria?
El tratamiento de los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) es más efectivo bajo la supervisión de un equipo multidisciplinario de profesionales, que generalmente está compuesto por un médico, un dietista o nutricionista y un psicoterapeuta.
El proceso terapéutico engloba orientación nutricional, atención médica y psicoterapia, ya sea individual, grupal o familiar.
Para ciertas condiciones, como el trastorno por atracón, la ansiedad, la depresión u otras afecciones de salud mental, el médico puede prescribir medicación específica. Y en casos de extrema pérdida de peso o complicaciones médicas graves, puede ser necesaria la hospitalización del paciente.
Autor: Francisco Hidalgo
Fuente: https://psicologoensevilla.net/
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